Advierte ONG de la construcción ilegal de una granja porcícola en Jalisco
Ciudad de México. Greenpeace México advierte sobre la construcción ilegal de una granja porcícola denominada “Granja Porcícola el Gavilán”, en el Municipio de Valle de Guadalupe en el estado de Jalisco.
La ONG señala en un comunicado que la granja “se construirá en un predio previamente deforestado y el cual tiene sobre sí una sanción por parte de Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) debido a que existieron diversas irregularidades”.
Greenpeace señala que el caso fue atendido por Profepa en 2016 y las irregularidades encontradas por la dependencia ambiental federal fueron: el cambio de uso de suelo de terrenos forestales sin el permiso correspondiente; la remoción de vegetación forestal en aproximadamente 68 hectáreas sin contar con autorización; así como realizar el aprovechamiento forestal sin contar con la autorización que debió emitir la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
La ONG comenta que ya tuvo reunión con el presidente municipal de Valle de Guadalupe, Raúl Rentería Torres, quien les informó “que no se iniciarán obras, sin embargo, dar el permiso de construcción de la granja es parte de las responsabilidades de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial de Jalisco (SEMADET)”.
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Por ello, las organizaciones han buscado tener diálogo con su titular, Sergio Humberlo Graf Montero, sin que hasta la fecha se haya obtenido respuesta de parte de la Secretaría. Como consecuencia de ello.
En cuanto a la revisión de la Manifestación de Impacto Ambiental, Viridiana Lázaro, campañista de Greenpeace México señaló que: “Hemos revisado la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) de la Granja el Gavilán y lo que hemos encontrado es sumamente preocupante como que el suelo en el que se pretende construir es relevante por su cobertura vegetal, ya que brinda servicios ambientales como generación de agua”.
“También existe el riesgo de contaminación del suelo y cuerpos de agua por exceso de nutrientes, ya que no se pueden metabolizar debido a que se estarán desechando grandes cantidades de cerdaza al día (casi 2 toneladas al día)”.
“Además, se menciona que las excretas se utilizará como alimento para el ganado, no obstante, si las excretas no son procesadas adecuadamente pueden presentar cierta toxicidad y riesgo potencial para la salud animal y humana. No sólo eso, en la misma MIA no detallan el procedimiento de limpieza de la granja y los cerdos ni el tratamiento de los desechos resultantes de esta actividad”. concluyó Viridiana Lázaro.
La activista hace mención de que en el estudio indican que existe un pozo de agua propio, sin embargo, no se anexa información de dicho pozo.” Por ello, lo que sabemos es que la información presentada se encuentra incompleta”.
Por lo anterior, la ONG pide “la intervención urgente de la SEMADET —que fue el organismo que otorgó una autorización condicionada— para la protección del medio ambiente, invocando el principio precautorio para resguardar la salud de las personas y la biodiversidad, poniendo un freno a la ganadería industrial en el estado de Jalisco”.
Importancia de una granja porcícola
La cocina mexicana tiene gran variedad de platillos elaborados con carne de cerdo, su consumo representó en 2017 una producción total de 1.4 millones de toneladas de carne de cerdo, con un valor de la producción de 62.2 mil millones de pesos, obtenidos de 17.5 millones de animales sacrificados, según el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), órgano administrativo desconcentrado de la Secretaría de Agricultura.
Jalisco es la principal entidad productora del cárnico, con ingresos por 14.6 mil millones de pesos; le siguen Sonora y Puebla, con 9.3 mil millones y 6.9 mil millones de pesos, respectivamente.
Cabe recordar que en México las granjas porcícolas han despertado interés en la sociedad por las afectaciones medioambientales y los daños irreversibles que éstas causan desde su construcción y operación.
Entre los señalamientos que hacen organizaciones ambientales en contra de este tipo de industria son: La deforestación, la pérdida de hábitat de especies de flora y fauna, contaminación del acuífero y el suelo con aguas residuales, emisiones de gases de efecto invernadero y lo anterior que constituye violaciones a los derechos humanos a un medio ambiente sano y a la salud.
Para el SIAP “las granjas para cerdos son unidades pecuarias dedicadas a la crianza de ganado porcino con fines comerciales, para obtener algún beneficio productivo y que cuentan con un mínimo de 20-50 metros cuadrados de área de corrales”.
Las granjas pueden ser de cuatro tipos: de pie de cría, productoras de lechones, de ciclo completo y de engorda.
La porcicultura no está limitada para desarrollarse en alguna zona geográfica en específico, siempre y cuando sea bajo ambientes controlados.